trabajar me ayuda a aprender
a pensar
mis experiencias como director últimamente me enseñaron muchas cosas
pero hay una fundamental, fundacional que creo aprendí como ley de fuego
la SINCRONICIDAD, la SINERGIA, no hay forma de generarla
se genera o no
hacer teatro es una cuestión humana
no artística, puramente
siempre fui un arriesgado que le gusto mezclar elementos humanos, personas, que en apariencia son disimiles y que luego eclosionen juntos
siempre me salio bien
muy bien
pero existe el margen del error
y del error aprendí
aprendo
se que nunca mas trabajare con personas que sus energías no colaboran a la sinergia que deseo lograr
hacer teatro es un gran evento para mi
y no me gusta el material humano que me quita las ganas de ser el anfitrión
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